Que el amor no llega poco a poco, que surge a lo bestia, y yo estoy ahi.

Llevamos más de dos horas hablando, sentados un un banco mientras que la gente pasa alrededor nuestra, hablando de nuestros gustos, aficiones y de todo lo que tenemos en común, mientras nos miramos mutuamente sin dejar de sonreír, es un momento muy especial, más que especial. Es con momentos como este cuando se me olvidan los problemas, se me olvida el resto del mundo. Pero todo esto se acaba, cada vez que miro tu cuello, y veo que la guarra de tu novia ya ha dejado su marca puesta en ti. Seguro que lo ha echo aposta, para que no me haga ilusiones, pero yo no soy de esas que se ilusionan fácilmente, sin ni siquiera tener motivos. Yo he visto como me miras, a ella no la miras igual, ella también se ha dado cuenta. Yo he visto tu cara cuando estas con ella, no es de mucho entusiasmo, sin embargo conmigo te sientes a gusto. Todo indica una cosa, estas con ella por pena, por nada más. Yo lo sé, tú lo sabes y ella también lo sabe. Lo único que quieres es estar con una chica que de verdad te quiere por como eres, y no por ser quien eres. Sé que por mucho que yo te diga, a ella no la vas a dejar, no puedes hacerla eso, la tienes cariño, tampoco voy a obligarte a hacerlo, no soy de ese tipo de persona, soy feliz con lo que tengo. Quizá seria mas feliz a tu lado, estando contigo como algo mas que amigos, pero no tengo tiempo de estar soñando toda la vida, tengo el tiempo justo para vivirla. Ahora, estoy sentada hablando con el chico más guapo del instituto, no puedo pedir más, muchas quisieran estar en mi lugar, pero las cosas van poco a poco, lo que tenga que pasar pasará.